sábado, 28 de noviembre de 2015

"Requiem en la isla de las series adormecidas"

27 de noviembre de 2015,
por Miguel A. Mateos Carreria.

Durante mucho tiempo los espectadores podían ver que en televisión se producía una "muerte en las ondas" en cuanto a contenidos. La calidad de muchos de ellos ha ido cayendo tanto que la televisión se ha ido convirtiendo en la isla de las series perdidas, y muchos de los elaboradores de programas y en concreto de las series de televisión se han convertido en Ulises navegando entre cantos de sirena.

Muchos han caído bajo su influjo en los diferentes canales de televisión. 

Más algunos cuál Ulises se enfrentaron a su canto, se sobrepusieron a él, y miraron lo que se había estado produciendo y emitiendo en España en los los últimos 15 años. Las series nacionales estaban desapareciendo de la pequeña pantalla, los llamados "culebrones" en los mediodías, las series extranjeras sobretodo americanas y británicas en las tardes y en las noches. Habían desembarcado y se han quedado ahí, entre nosotros. Muchas de ellas son series de calidad, todo ahí que decirlo, con un gran trabajo detrás por parte de los guionistas, directores y actores. Otras no.

Aquellos que no habían caído bajo los cantos de sirena comenzaron a fijarse en esos formatos y a adaptarlos al estilo español. 

Así han surgido nuevas series de televisión: "Águila Roja", "Luna, el misterio de Calenda", "Los misterios de Laura", "Mar de Plástico", "El Secreto de Puente Viejo", "Gym Tony", "Aquí no hay quién viva", "Olmos y Robles", "Isabel", "Aída", "Pulseras Rojas", "Gran Hotel", "Velvet", "Cuéntame como pasó",  "Tierra de Lobos", "Serramoura", "El Ministerio del Tiempo" o "Los Protegidos", entre muchas otras series. 

Por primera vez los guionistas y directores de series de televisión en España comenzaban a redirigir el camino hacia el marco de las grandes series que buscan reconocimiento a nivel mundial y no simplemente la subvención del Estado. Un gran cambio de mentalidad que en el cine todavía no se terminado de producir. Ese despunte nacional, la mezcla natural de lo externo con lo que siempre hemos tenido dentro ha hecho que los grandes productores de series a nivel mundial tengan miedo de lo que se puede llegar a hacer en España en ese campo. El Boom de las ventas de series españolas tanto dentro de España como en el extranjero ha asustado y mucho.

Un claro ejemplo es la campaña que desde las islas británicas se realizó en contra de la serie "El Ministerio del Tiempo" diciendo que era una copia de "Doctor Who". La realidad ha sido muy distinta. La serie es completamente diferente en idea y estilo a Doctor Who. La única semejanza, los viajes en el tiempo.

Se ve que como con esa no han podido cargar a su gusto ahora cargan sobre las series históricas o con cierto contexto histórico.

Miedo. Es lo que me da la sensación que tienen con estas críticas, críticas que no hacen a las propias series que emiten en sus países, no he visto que las mismas criticas sobre la interpretación de los personajes se hagan, por poner un ejemplo a los actores que trabajan en la serie "Downton Abbey", "Roma" o "Vikings" por citar tres ejemplos. Es muy fácil ver la mota en el ojo ajeno y no la viga en el propio.

¿Tenemos alguna culpa en esa lluvia de criticas? Seré sincero: Si. Los fans en algunos casos han cargado contra el trabajo de un actor o la forma de ser del personaje de alguna serie, un ejemplo lo encontramos con el personaje de Clara en "Doctor Who", un personaje que ha sido muy criticado y que a mi entender no merecía tal crítica.

Sin embargo, es cierto, "Downton Abbey", "Roma" o "Vikings" son junto a "Doctor Who" o "Sherlock" de las mejores series británicas que nos podemos echar a la cara, como "CSI", "Mujeres desesperadas", o "Modern Family". Son de esas series que llegan desde el otro lado de las aguas atlánticas ya sea desde el otro lado del Canal de la Mancha o desde el oeste lejano del Atlántico. Son series que estarán siempre ahí, en nuestra memoria colectiva por mucho tiempo como "Falcon Crest", "Dallas", "Víbora Negra" y otras.

¿Por qué no reconocer que en España también producimos muy buenas series? ¿Por qué esa crítica al trabajo "made in Spain"?

A mi entender esas críticas que hacen es como dar un golpe con un guante blanco en el rostro de los guionistas, directores y productores españoles para obligarlos a recoger el reto y enfrentarse en duelo contra ellos, para que se luche con corazón de león por crear más series de calidad en contenidos, documentación y actuación. Nos invitan a esforzarnos para vencer al estilo de "El Capitán Trueno" con un grito de "¡Por Santiago y cierra España!".

En España tenemos una ventaja en la actualidad pues tenemos muchos escritores y guionistas muy creativos siempre los hemos tenido, aunque preferimos muchas veces mirar al extranjero, mientras que en otros países se han encasillado en un estilo cerrado y unos guiones dirigidos muchas veces más al consumismo que a la recreación real de una aventura o un tema. Es en ese campo donde podemos vencer, tenemos ejemplos claros en el cine con "Extinction" basada en la novela de Juan de Dios Garduño "Y Pese a todo", en series y miniseries actuales como "Habitaciones Cerradas", "Victor  Ros", "Hispania", "Bandolera", y otras muchas, o mirar atrás al pasado con "Cañas y Barro", "Cuentos y leyendas", o "Los Pazos de Ulloa".

No. No debemos permanecer en esa isla de series adormecidas donde se quiere encasillar por algunos el trabajo realizado en España. No sigamos la música y el canto de ese réquiem dirigido a las series creadas aquí. 

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